15.04.2022 El Día del Niño
Cuando la infancia se encuentra con el cine

El 15 de abril se conmemora el Día del Niño con el propósito de fomentar los lazos entre los pequeños, promover sus derechos y su bienestar. ¿Puede ser el cine un estímulo positivo para ellos? A continuación, os proponemos un breve recorrido por tres festivales del país que tienen a los niños como protagonistas.
Comenzamos en Extremadura. Allí, la Asociación Cultural 24 Fotogramas organiza el festival IYFF Plasencia en Corto como un punto de encuentro entre niños y jóvenes de todo el mundo alrededor del cine. Durante una semana, los más jóvenes se encuentran con profesionales del sector y figuras destacadas del ámbito de la cultura. Se trata del culmen del trabajo que una gran variedad de centros educativos hacen en torno a propuestas audiovisuales. El cine se convierte en algo que puede verse, pero también crearse sin importar la juventud de los participantes.
Seguimos, seguimos… hasta llegar a Cataluña. En Barcelona, El Meu Primer Festival se asienta como un espacio de colaboración entre la Asociación Cultural MODIband e instituciones culturales como La Filmoteca de Catalunya o Caixaforum. Juntos impulsan una propuesta para el cine infantil, disfrutable en familia. Se construye así un lugar de ocio que, en esta ocasión, cambia la comodidad de la película en el sofá por el asombro de los más pequeños disfrutando juntos de la gran pantalla. Sin embargo, no se trata sólo del qué, sino del cómo. La programación infantil recae sobre animaciones pedagógicas o concursos de crítica cinematográfica y dibujo. Así, el cine encarna en los niños un estímulo de bienestar: lo ven juntos, lo entienden y crean juntos.
Finalmente, llegamos a la capital. Miembro de MATRIZ, el festival MICE Madrid lleva cinco años comprometido con el cine educativo en un contexto internacional. Acerca el cine a alumnos de entre 8 y 12 años en un doble sentido. Por una parte, revela sus entresijos a través de contar cómo se hace, sugiriendo que algún día ellos también pueden hacerlo. Por otra parte, acerca a los estudiantes geográficamente. En la pantalla pueden ver historias a través de las que identificarse con jóvenes como ellos, aunque estén a decenas de miles de kilómetros de distancia. De esta manera, el cine se convierte en un lugar que une la creatividad con la empatía.